La cocina y el baño son dos de las estancias en la vivienda que más acusan el uso continuo de las mismas y que, por tanto, con mayor frecuencia necesitan una mejora a base de reformas.
No obstante, conseguir una buena cocina, funcional y en perfecto estado y sin renunciar al aspecto estético no es difícil, se puede lograr con pequeños cambios sin necesidad de grandes obras.
Cambiar los tiradores de la cocina
Los tiradores más comunes en la actualidad son los rectos y de aspecto metalizado: cromo, cobre, tonos dorados… o incluso apostar por muebles sin tiradores. Los tiradores se consiguen en el mercado con facilidad, y su instalación es bastante sencilla.
Cambiar la encimera
La encimera sufre mucho desgaste: preparar todos los alimentos, cambios de temperatura, ralladuras, cortes, humedad… Si está en mal estado a anticuada, una opción interesante es instalar un modelo de madera maciza o de melanina, pero con los cantos rectos.
Vinilos para proteger el salpicadero
Justo la zona de la cocina sobre la encimera, en lugar de ir alicatada puede ir con un vinilo o con una placa de acero, para proteger el salpicadero. Esto ofrece un cambio total de aspecto a la cocina, la moderniza y la deja prácticamente como nueva.
Un grifo deluxe
Otra práctica económica y que no supone grandes obras, sustituir el grifo de cocina por uno deluxe, extensible y cuyo diseño atraiga las miradas de los invitados. Con este pequeño cambio la cocina cambia un poco de aires.
Complementos y accesorios
En ocasiones no es necesario sustituir elementos, sino añadir complementos. Una de las fórmulas con las que la cocina gana en presencia es situar sobre la placa de inducción dos láminas protectoras opacas, que tengan un diseño similar o parecido a la encimera. Así, la placa cuando no se usa está protegida.
Otros complementos y accesorios interesantes son plateros de diseño especial, el cubo del reciclaje y la basura, algún elemento vegetal…
Cuadros y espejos en la cocina
¿Quién dijo que la cocina no puede ser una estancia con gran protagonismo decorativo? Al igual que plantas se pueden colocar cuadros, espejos, pizarras para apuntar notas… la clave, como siempre, está en dejar volar nuestra imaginación.
Las alfombras
Un último elemento con el que la cocina puede renovar su imagen es una buena alfombra, especialmente las hidráulicas, que ocultan y protegen el suelo real de la estancia.