Las cocinas americanas son las que están integradas en el salón o en otra estancia de la vivienda. Hasta hace unos años no eran muy populares en España, pero desde hace un tiempo han ido ganando en interés, ya que el espacio abierto que se genera ofrece mayor sensación de amplitud. Hoy te mostramos cómo diseñar una cocina americana, pero antes hablamos de sus ventajas.
¿Qué ventajas ofrecen las cocinas americanas?
Cuando hablamos de espacios integrados, salón y cocina, lo que se obtiene es más amplitud, más metros cuadrados habitables y aprovechables. Donde antes había uno o más tabiques, ahora hay más espacio para que entre más luz.
Si la cocina tiene salida directa al exterior y se combina con entrada de luz natural también desde el salón, esto se traduce en un menor consumo eléctrico. A su vez, el día a día se vuelve más práctico, porque todo está a mano.
Por otra parte, una distribución de este tipo facilita la sociabilidad. Ya no hay que apartarse del resto de la familia para cocinar, o apretarse en un espacio pequeño para completar tareas domésticas.
Cocina americana y diseños
A la hora de diseñar una cocina americana hay que tener en cuenta la distribución de los elementos y el tipo de cocina a montar, pues no es lo mismo un espacio con una isla, con una barra, con una península o incluso con un ventanal, de modo que no tengamos una estancia abierta sino semiabierta.
A partir de ahí hay que jugar con la disposición de los electrodomésticos y su estilo. Estos suelen sr en tonos metalizados, por su versatilidad, y se instalan en muebles columna.
Los taburetes y sillas altas son bienvenidas para la zona de la barra o la isla, que es la que suele actuar como elemento divisorio entre la cocina y el salón. En muchos casos suele incluirse una mesa accesoria junto a la isla, a modo de zona comedor.
Por último, conviene aprovechar al máximo el espacio de almacenamiento, y aquí son bienvenidos los muebles columna y la zona inferior de la isla central.